viernes, 22 de agosto de 2014

El tiempo pasa y uno sigue vigente

A veces uno se embarca en diferentes proyectos que, como toda cosa nueva, nos emociona. Por lo general tenemos metas, sueños y muchas perspectivas para cada una de las cosas que iniciamos, pero luego, por motivos de la vida misma, o por cosas que solo tendrían que pasar, terminamos por cambiar lo que teníamos pensado en un principio.

Un blog, no está alejado de esto, y quienes lo hacemos tampoco.

Esto mismo sucedió con Histocracia, el blog que había comenzado hace más de 5 años con la intención de ser un blog de noticias e interes general.

Cuando uno comienza con un blog generalmente tiene como idea compartir cosas que le llamen la atención, que le sean de su agrado o en su defecto, que tengan una razón del por qué son compartidas. Fue así como el blog fue creciendo hasta que decidí que debía de tener nombre propio.

Aún siendo un pasatiempo nada más, Histocracia fue creciendo, poco a poco, paso a paso y casi sin darme cuenta, un día alguien ya estaba hablando de él.

La ventaja de hablar sobre actualidad y noticias es que, si tenemos suerte, habrán muchas personas buscando la información que queremos compartir, y mucho mejor aún si podemos lograr una buena clasificación en los buscadores para que estas personas pudan ubicarnos facilmente.

Tener un blog no es fácil, a veces uno piensa que solo basta con escribir algo de vez en cuando y cuando se nos ocurra, pero realmente esto puede y no ser así, todo depende de lo que nosotros podamos esperar de dicho espacio en Internet.

Buscar información, escribirla, editarla, tratar de agregar un punto de vista y demás cosas son tareas que demandan de un tiempo considerable, tiempo que a veces quienes hacemos un blog por nuestra cuenta no tenemos.

Esta es la razón fundamental por la cual muchos blogs quedan en el olvido. E Histocracia, no pudo escapar a ese destino...

Sin embargo, hoy a casi 2 años de la última publicación, he vuelto al lugar de en donde nació esta pasión por escribir, por compartir, por tratar de brindar algo mediante un espacio en Internet, y, aunque quizás no haya una frecuncia grande, lo importante es que he vuelto. Al menos, es importante para mi.

El tiempo pasa y uno sigue vigente. Ser vigente es algo que cuesta mucho, pero mucho en verdad, sobre todo cuando uno tenía cirtas perspectivas sobre esto, y luego se da cuenta de que no todo es tan fácil o tan ideal.

Sin embargo, no importa cuanto tiempo pase, si es acaso que esto importa, lo que importa es que tengamos la voluntad de volver a hacer lo que alguna vez quisimos. Así es como hemos vuelto...