El dirigente norcoreano, de 69 años, falleció el sábado 17 de diciembre a las 23H30 GMT del viernes, según anunció entre lágrimas un presentador de la televisión estatal vestido de riguroso luto. Los funerales se realizarán el 28 de diciembre.
El líder había sufrido una apoplejía en el 2008, pero parecía haberse recuperado. El locutor dijo que murió en un tren debido al exceso de trabajo físico y mental mientras se dirigía a ofrecer "orientación en terreno", aunque la agencia Reuters lo atribuyó a un ataque al corazón.
El estado comunista ya había iniciado el proceso para transferir el poder a su hijo Kim Jong-Un, quién se cree tendría entre 25 y 30 años.
Tras conocerse la noticia, las Fuerzas Armadas de Corea del Sur fueron puestas en alerta de emergencia, informó la agencia de noticias Yonhap. Y el Gobierno convocó a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional.
El primer ministro japonés, Yoshihiko Noda, canceló un discurso que tenía previsto ofrecer poco después del mediodía al conocerse la noticia, reportó la agencia de noticias Jiji, mientras la Bolsa de Saúl se desploma un 4,87% tras conocerse la noticia.
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